¡Revolotean con un misterioso encanto! se posan con una elegancia enorme sobre las flores... qué colores tan fascinantes... esas eran las mariposas que sentía en panza....en algún remoto momento tenia esa sensación de novedad.
Mi cabeza enviaba mensajes, quería mandar sobre el corazón, ya no era esa chica sensible, ahora las mariposas estaban muertas en mi corazón, levantaba cada mañana mi ego mirándome al espejo y diciéndome una y otra vez a mi misma como antaño hizo mi madre "tu puedes dalo todo chica valiente".... con muchos años mas pero seguía siendo esa chica valiente que no teme nada ni a nadie, ambiciosa como la que mas, poderosa y segura de si misma que se subía a los tacones y se comía el mundo, aunque presumía de mis cualidades yo era consciente de que tenía muchos fallos, esas pequeñeces que todos tenemos, me decía mi voz interior.... me gustaba tanto minimizar las cosas malas que a veces acababa donde estaba por culpa de ello.
Yo creo que a todos nos llega un momento de plenitud, de recuperar todo aquello que gastamos en exceso (llámese confianza, tiempo, seguridad), a mi este momento me llega cuando siendo muy joven tengo que asumir el profundo desgaste que necesitamos los humanos sufrir entre nosotros mismos, o como cuando una duda puede costarte caro muy caro, cuando las cosas dadas y debidas al daño hacen que algo que hubo entre dos seres se vuelva irrecuperable, mas mariposas que se mueren en el camino, un camino el del amor que por mas intrigante que parece menos fácil es.
No hay comentarios:
Publicar un comentario