Apnegación, recuerdo muy bien la primera vez que escuché esta palabra, en un viaje en centroamérica, esa mujer relativamente joven amamantaba a lo que era un varón de unos veinte meses, el niño de tez morena lucía gordito, hermoso, con unos mofletes redondos, brillantes y colorados, se veía saludable!, esas mujeres ataviadas con unas faldas largas a rayas en vivos colores hablaban de las cosas del corazón, evidentemente yo como europea demasiado occidentalizada y con una educación excéntrica, peculiar, ciertamente algo franquista y repleta de cordialidades y de demasiados buenos modales escuchaba atentamente la conversación como si Stephen Hawking fuese el que hablaba, que por cierto me apasiona este hombre o mas bien su inteligencia y superación, ellas hablaban de hombres, de que no había que amarles demasiado, que solían fastidiar las cosas, que marchaban siempre con otra mas joven o guapa y que había que utilizarlos, esto ultimo quizás fue lo que me dejo extenuada, ¿utilizarlos?- pensé ¿Cómo se utiliza a un hombre? o a una persona?, es complicado quizás yo llegados a este punto me había dado cuenta que era mas racional de lo que pensaba, sencillamente era de ese tipo de mujer que cuando las cosas no funcionaban con un hombre recogía mi vida y daba media vuelta a otra cosa, no me tomaría las molestias oportunas en utilizar a ningún tipo, no era mi modus operandi.
En este viaje a Mexico tuve la oportunidad de conocer a ciertos hombres, sus rasgos poco refinados, oscos, duros, típicos de esa zona del planeta, los observaba y a trasluz veía lo mismo que cuando ves a un holandés o a un asiático, mismos hábitos pero diferente modo de desarrollarlos, otra forma de echar el sedal digamosl.
Ahora algunos años después empiezo a comprender la psicología masculina, que mecanismos de defensa poseéis, cual básicos o complejos dependiendo del tema podríais llegar a ser, a mi no me gusta generalizar, no hay patrón a seguir, cada hombre que he conocido ha sido un reto para mi, un universo distinto ajeno, con sus peculiaridades, con sus manias, sus habitos. Durante mucho tiempo estuve equivocada en muchos aspectos, ciertos hombres sin saberlo me lo demostraron, vosotros también amais, os entregáis y no lo haceis a medias, también lloráis, jugáis todo a una sola carta, a vosotros también os rompen el corazón, también sentís con cada caricia, teneis paciencia y sabeis esperar....en resumen también teneis corazón aunque a veces no lo sabeis utilizar....
-----Texto dedicado a P---- sin duda un ser diferente, peculiar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario